Martes 6 de Diciembre de 2.011 - Salón de Usos Múltiples del CPCES

En un salón colmado de colegas, familiares y amigos se dieron cita 22 Contadores Públicos a quienes el Consejo Profesional les hizo entrega de una medalla de plata a los profesionales que este año cumplieron 25 años de ejercicio profesional.

El Presidente del Consejo Cr. Oscar Briones agradeció la presencia de todos y especialmente a los colegas de Orán y Tartagal que llegaron acompañados por sus hijos para participar de tan importante acto. Las Delegaciones del interior van creciendo y Orán hoy ya tiene su sede, estando próximas a inaugurarse las de Tartagal, Rosario de la Frontera y Metán.

Las emociones se sucedieron mientras los padres entregaban las medallas a sus hijos, los hijos a sus padres, las esposas a su maridos y hasta los nietos a sus abuelas.

Las palabras en representación de todos los que cumplen este año, 25 años de profesión, estuvieron a cargo de la Cra. Rossana Lucca quien le imprimió un matiz humano, familiar y emotivo a su discurso, quebrándose su voz en varias oportunidades, vencida por la emoción.

“Es maravilloso que hoy hayamos decidido dejar a un lado nuestras obligaciones rutinarias por el simple gusto de compartir entre pares un momento muy significativo en nuestras vidas.
Siento una gran satisfacción por compartir con todos Uds. y con mi familia esta etapa de mi vida.

Me permito trasmitirlos un párrafo que leí hace poco y que resume casi por completo mi sentir en esta etapa de mi vida.

Quise ser vida y les pedí a mis padres nacer, agradeciéndoles eternamente la posibilidad de desarrollarme, estudiar y superarme.

Quise crecer física y espiritualmente y les pedí a mis maestros me colmaran de enseñanzas de vida.

Quise compartir el verdadero amor y prolongar mi existencia en la vida de otros y elegí ser esposa y madre.

Quise compartir penas y alegrías con alguien que fuera como mi sombra y elegí una amiga.

Quise siempre ayuda a vivir, enseñar lo aprendido, trasmitir el amor recibido, tener las manos llenas de tanto dar y elegí ser un hombre de bien y un profesional comprometido.

Quiero terminar estas palabras con un GRACIAS con mayúsculas al Consejo, incluyendo en él no solo a los colegas que en las distintas etapas de nuestra profesión nos acompañaron, sino también a los colaboradores que en el día a día y co una hermosa sonrisa nos asisten.

Gracias a todos Uds., colegas que cumplen las bodas de plata de la profesión, por los momentos compartidos y por permitirme expresarme en nombre de Uds. Se acuerdan lo que pensábamos apenas recibidos de los contadores que cumplían 25 años? ... y bueno ... ya llegamos.

Un gracias infinitamente especial a mi angelito Benjamín.

MUCHAS, PERO MUCHAS GRACIAS

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