Escribe: Cr. Juan Pablo Russi. Sabóm Cinturón Negro 2º Dan de Sipalki-Do

Entiendo al concepto de “fortaleza“ como la constancia para alcanzar el bien y la capacidad de superar los obstáculos que a ello se oponen, aprendiendo de cada experiencia, por más dolorosa o insignificante que sea. Por eso, con este plus, encaro todos mis proyectos para buscar que se realicen, sumando perseverancia, dedicación y, fundamentalmente, muchas ganas y pasión. En todos los ámbitos de mi vida, mirando para adelante siempre.
Sipalki-Do (camino de las 18 técnicas), es un Arte Marcial de origen mongol, que luego se desarrolló en Corea. Desde el año 1970, el Gran Maestro Soo Nam Yoo 10º Dan (recientemente fallecido en Buenos Aires), lo introdujo en Occidente y se difundió por todo el mundo. Nos permite desarrollar seguridad en nosotros mismos, concentración, respeto y disciplina, además de mantenernos en forma. Consiste en técnicas estratégicamente estudiadas para ser aplicadas en situaciones límites en la lucha, con o sin armas.
Actualmente soy Sabóm (profesor) Cinturón Negro 2º DAN de Sipalki-Do, fruto de 13 años de práctica, compartiendo felizmente entrenamientos con personas de ambos sexos y de todas las edades (desde niños o adolescentes hasta personas adultas), con la posibilidad de participar y obtener varios logros deportivos en competencias provinciales, regionales, nacionales e internacionales.
Con mis Maestros y compañeros de este deporte, pero principalmente, quienes lo entienden como un estilo de vida, tenemos muchas metas y objetivos, entre los cuales prima constituir una nueva Asociación provincial con personería jurídica; difundir con mucha fuerza nuestro arte marcial; abrir más escuelas en gimnasios o clubes; y dictar capacitaciones en entidades del ámbito privado y público. A mediano plazo, tenemos la intensión de ofrecer a nuestro Consejo, la posibilidad de ser una gran
alternativa deportiva para la práctica de nuestras/os colegas matriculados.
Sipalki-Do, antes de ser deporte es una disciplina, que justamente otorga disciplina, ya que el respeto a las normas del gimnasio (Dojang), al profesor y a los compañeros es obligatorio si se quiere aprender este arte marcial. Entender nuestra filosofía, es entender que no está relacionada con la fuerza bruta para destrozar a un oponente, ya que cualquier practicante lucha por superarse a sí mismo, y debe vivir y actuar como un ser humano ejemplar.
El Sipalki-Do es, sobre todo, un camino para mejorarse a sí mismos, de manera constante, en un marco de compañerismo y trabajo en equipo.